Francia ha desmantelado el campamento conocido como la ‘Jungla’ de Calais. Miles de personas que intentaban sobrevivir mientras buscaban llegar al Reino Unido han sido repartidas por todo el país. Pero otros miles han llegado hasta las calles de París, donde el Gobierno les ha vuelto a enviar una vez más la policía.
En precarias condiciones higiénicas, sobreviviendo gracias al trabajo de voluntarios y de algunos vecinos del barrio, estos migrantes, llegados entre otros lugares de Sudán, Somalia y Afganistán, no entienden que Francia les inflija más sufrimientos, ya que no son delincuentes, son hombres, mujeres y niños que escaparon de sus países para salvar la vida y encontrar un lugar donde rehacerla. Se jugaron la vida para llegar a Europa y nunca pensaron que acabarían durmiendo en las calles de París, pasando hambre y frío.
Source: Informativo Más Voces